/ lunes 1 de octubre de 2018

Aprender toda la vida

Carlos Ceja Silva

 

Todo momento es momento de aprender, si hacemos las cosas bien, nos fortalecernos. Más que culpar a otros, es mejor aprovechar el momento, seguir aprendiendo y con el conocimiento logrado, actuaremos, puesto que si nos cuentan relatos de vivencias, es posible que pronto o tarde los olvidemos, si recibimos enseñanzas, éstas las recordamos y más si nos involucramos para aprender.

Ante la situación actual, respecto a los incidentes con Estados Unidos y su presidente, nos ha hecho conocer nuestra realidad, al no confiar en los compromisos adquiridos por quienes le representan. Con la sentencia de vivir como si fuese a morir mañana y lo que hemos visto hasta el momento, es el ensayo previo a lo que pudiera suceder después y que nos podrían cimbrar por la tensión que se refleja en un ambiente que no ha permitido unificar esfuerzos.

En cuanto al aprendizaje, lo tenemos que hacer como si tendremos que vivir para siempre, superando este momento en el que no estamos preparados, por la no aplicación de acciones para lograr el desarrollo económico, para hacer frente a lo que representan las políticas implementadas en materia migratoria, comercial y de seguridad, como país.

Con un escenario en el que las deportaciones masivas sean una tragedia, las negociaciones comerciales que se den en términos inaceptables, las exigencias para asegurar las fronteras podrían desestabilizar y causar efectos demoledores y quien ha influido en procesos electorales en países europeos lo hace en nosotros, bastando con seguir a quien enarbole los principios ultraconservadores y formamos parte de un país vulnerable, no sólo por la diferencia entre los recursos, economías y Fuerzas Armadas, también porque no permite entender que el apoyo al presidente electo no es una legitimación de sus errores anteriores sino un acto de responsabilidad hacia el futuro de los compromisos adquiridos.

Para seguir aprendiendo toda la vida, tenemos algo que mejorar, inquietudes que resolver, habilidades que adquirir y mejorar y objetivos que alcanzar, debemos tener voluntad, para movernos y alcanzar nuestras metas, puesto que en nuestro camino hacia el crecimiento personal nos encontramos con limitaciones que pueden hacernos desistir y renunciar a todo. Debemos evitar el miedo, puede ser que el motivo que lo produce puede ser infundado por nosotros o por nuestro alrededor y no son más que tendencias que no son ciertas. Las limitaciones solamente se encuentran en nuestra mente.

Alcanzar nuestros objetivos requiere aprendizaje y trabajo, requiere voluntad. Hay personas cuya voluntad es más fuerte que en otras, pero la voluntad no es algo inamovible: se puede entrenar. Puede ser que ya sentimos que hemos perdido toda ilusión y nos encontramos estancados en nuestra vida. Esto no significa que todo esté perdido. En nuestro camino encontraremos motivos para seguir, encontrar mentores o maestros que suponíamos que ya no estarían en disposición de atendernos, pero ellos nos empujan de nuevo a avanzar en nuestro camino y en nuestro crecimiento personal y espiritual.

Nosotros en cualquier momento de nuestra vida podemos experimentar sensaciones de que nada nos queda por hacer, sin embargo, siempre tenemos objetivos que alcanzar y es por ello que debemos seguir avanzando, sin dilación y aprender constantemente a lo largo de nuestra vida para así, crecer como personas que hacemos hasta lo que no podemos hacer para poder aprender cómo hacerlo, como lo decía Pablo Picasso. La vida es una experiencia de aprendizaje, sólo si aprendemos. (L)

Carlos Ceja Silva

 

Todo momento es momento de aprender, si hacemos las cosas bien, nos fortalecernos. Más que culpar a otros, es mejor aprovechar el momento, seguir aprendiendo y con el conocimiento logrado, actuaremos, puesto que si nos cuentan relatos de vivencias, es posible que pronto o tarde los olvidemos, si recibimos enseñanzas, éstas las recordamos y más si nos involucramos para aprender.

Ante la situación actual, respecto a los incidentes con Estados Unidos y su presidente, nos ha hecho conocer nuestra realidad, al no confiar en los compromisos adquiridos por quienes le representan. Con la sentencia de vivir como si fuese a morir mañana y lo que hemos visto hasta el momento, es el ensayo previo a lo que pudiera suceder después y que nos podrían cimbrar por la tensión que se refleja en un ambiente que no ha permitido unificar esfuerzos.

En cuanto al aprendizaje, lo tenemos que hacer como si tendremos que vivir para siempre, superando este momento en el que no estamos preparados, por la no aplicación de acciones para lograr el desarrollo económico, para hacer frente a lo que representan las políticas implementadas en materia migratoria, comercial y de seguridad, como país.

Con un escenario en el que las deportaciones masivas sean una tragedia, las negociaciones comerciales que se den en términos inaceptables, las exigencias para asegurar las fronteras podrían desestabilizar y causar efectos demoledores y quien ha influido en procesos electorales en países europeos lo hace en nosotros, bastando con seguir a quien enarbole los principios ultraconservadores y formamos parte de un país vulnerable, no sólo por la diferencia entre los recursos, economías y Fuerzas Armadas, también porque no permite entender que el apoyo al presidente electo no es una legitimación de sus errores anteriores sino un acto de responsabilidad hacia el futuro de los compromisos adquiridos.

Para seguir aprendiendo toda la vida, tenemos algo que mejorar, inquietudes que resolver, habilidades que adquirir y mejorar y objetivos que alcanzar, debemos tener voluntad, para movernos y alcanzar nuestras metas, puesto que en nuestro camino hacia el crecimiento personal nos encontramos con limitaciones que pueden hacernos desistir y renunciar a todo. Debemos evitar el miedo, puede ser que el motivo que lo produce puede ser infundado por nosotros o por nuestro alrededor y no son más que tendencias que no son ciertas. Las limitaciones solamente se encuentran en nuestra mente.

Alcanzar nuestros objetivos requiere aprendizaje y trabajo, requiere voluntad. Hay personas cuya voluntad es más fuerte que en otras, pero la voluntad no es algo inamovible: se puede entrenar. Puede ser que ya sentimos que hemos perdido toda ilusión y nos encontramos estancados en nuestra vida. Esto no significa que todo esté perdido. En nuestro camino encontraremos motivos para seguir, encontrar mentores o maestros que suponíamos que ya no estarían en disposición de atendernos, pero ellos nos empujan de nuevo a avanzar en nuestro camino y en nuestro crecimiento personal y espiritual.

Nosotros en cualquier momento de nuestra vida podemos experimentar sensaciones de que nada nos queda por hacer, sin embargo, siempre tenemos objetivos que alcanzar y es por ello que debemos seguir avanzando, sin dilación y aprender constantemente a lo largo de nuestra vida para así, crecer como personas que hacemos hasta lo que no podemos hacer para poder aprender cómo hacerlo, como lo decía Pablo Picasso. La vida es una experiencia de aprendizaje, sólo si aprendemos. (L)