/ lunes 4 de julio de 2022

¿Pistolas o rosas?

¿Facilitar la entrega de armas a la población para que se defienda es la mejor opción en la lucha contra la inseguridad? Las estadísticas muestran que no pero para el Partido Revolucionario Institucional parece una solución adecuada, muy al estilo del Partido Republicano en Estados Unidos.

En contraparte, Morena le apuesta al desarme como parte de su estrategia de seguridad. El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla anunció que a partir de este 4 de julio se inicia con el programa de Canje de Armas por electrodomésticos -que lleva a cabo la Secretaría de la Defensa Nacional de forma continua en diversos estados de la República- así como el desarme de los grupos de civiles que mantienen retenes en carreteras y entradas a comunidades.

La tarea no sería difícil si nos encontráramos en un estado que garantiza la seguridad de sus habitantes, que cuenta con policías municipales y estatales confiables y debidamente equipadas y capacitadas para hacer frente no solo a la delincuencia común, sino a los grupos del crimen organizado que controlan gran parte del territorio michoacano. Pero el programa de desarme inicia sin brindar ningún tipo de garantía a los ciudadanos que viven en la zozobra.

Pese a ello, apostarle al desarme parece una decisión más sensata que facilitarles a los ciudadanos el acceso a las armas para su autodefensa. El mejor ejemplo es lo que ocurre en Estados Unidos frente a la Unión Europea: el número de homicidios cometidos por arma de fuego en la unión americana resulta alarmante a pesar de que existen más armas que habitantes en la Unión Americana.

Con base el reporte de la organización Small Arm Survey, en Estados Unidos existen 120 armas por cada 100 habitantes, de las cuales el 85 por ciento está en manos de civiles, mientras que en países como Japón y Corea del Sur el promedio ronda en el 0. 2 por cada 100 personas.

La propuesta, anunciada por el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, estaría orientada a facilitar los requisitos para la adquisición y posesión de armas a la población para su “defensa”, muy al estilo de Estados Unidos que permite que desde los 18 años –en algunos estados desde los 16 años- se puedan adquirir armas y a los 21 equipos de mayor potencia.

Tan solo las estadísticas del primer semestre del 2022 muestran la gravedad del problema que enfrenta Estados Unidos: Hasta el mes de mayo se tenía el registro de 213 tiroteos masivos y 10 asesinatos en masa, además de la muerte de 17 mil personas causada por arma de fuego, según la organización Gun Violence Archive. Y estas muertes están relacionadas en su gran mayoría con civiles, no con ataques de grupos de la delincuencia organizada.

El índice de impunidad y corrupción en México podría generar un mayor acceso de la delincuencia a una mayor diversidad de armas, las cuales, se sumarían a las del mercado negro que dista mucho de desaparecer.

Hoy, los requisitos que establece la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos son pertinentes para tener un “control” adecuado de estos instrumentos. Los países que registran los índices más bajos de criminalidad y homicidios cometidos con armas de fuego no son aquellos que permiten a sus ciudadanos tener armas para su defensa, sino aquellos que cuentan con cuerpos policiacos preparados y honestos.

Gabinete blindado

Al cumplirse el primer año del triunfo de Morena en Michoacán, al partido oficial se le hizo buena idea realizar un festejo –ellos lo llamaron jornada de información- para celebrar su arribo al poder. Más allá de la pertinencia del encuentro, este sirvió para reafirmar aspectos importantes: La inasistencia y declaraciones de quien se asumía como dirigente estatal, Ana Lilia Guillén, muestra una clara división al interior del partido que seguramente se agudizará durante el proceso interno para la elección de consejeros; la zalamería mostrada al secretario de Gobernación, Adán Augusto López, lo mostró como el ungido para el 2024 y, por último, la declaración de que no habrá cambios en el Gabinete, al menos en los próximos meses muestra el nivel de compromiso que existe con algunos grupos políticos y empresariales.

Otro periodista asesinado

En Tamaulipas se registró el asesinato de Antonio de la Cruz, periodista en Ciudad Victoria. Con este ataque, suman 12 homicidios tan solo en el primer semestre de 2022. Esta cifra, correspondiente al 2017, era la más alta registrada en las últimas décadas, pero en todo un año.

¿Facilitar la entrega de armas a la población para que se defienda es la mejor opción en la lucha contra la inseguridad? Las estadísticas muestran que no pero para el Partido Revolucionario Institucional parece una solución adecuada, muy al estilo del Partido Republicano en Estados Unidos.

En contraparte, Morena le apuesta al desarme como parte de su estrategia de seguridad. El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla anunció que a partir de este 4 de julio se inicia con el programa de Canje de Armas por electrodomésticos -que lleva a cabo la Secretaría de la Defensa Nacional de forma continua en diversos estados de la República- así como el desarme de los grupos de civiles que mantienen retenes en carreteras y entradas a comunidades.

La tarea no sería difícil si nos encontráramos en un estado que garantiza la seguridad de sus habitantes, que cuenta con policías municipales y estatales confiables y debidamente equipadas y capacitadas para hacer frente no solo a la delincuencia común, sino a los grupos del crimen organizado que controlan gran parte del territorio michoacano. Pero el programa de desarme inicia sin brindar ningún tipo de garantía a los ciudadanos que viven en la zozobra.

Pese a ello, apostarle al desarme parece una decisión más sensata que facilitarles a los ciudadanos el acceso a las armas para su autodefensa. El mejor ejemplo es lo que ocurre en Estados Unidos frente a la Unión Europea: el número de homicidios cometidos por arma de fuego en la unión americana resulta alarmante a pesar de que existen más armas que habitantes en la Unión Americana.

Con base el reporte de la organización Small Arm Survey, en Estados Unidos existen 120 armas por cada 100 habitantes, de las cuales el 85 por ciento está en manos de civiles, mientras que en países como Japón y Corea del Sur el promedio ronda en el 0. 2 por cada 100 personas.

La propuesta, anunciada por el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, estaría orientada a facilitar los requisitos para la adquisición y posesión de armas a la población para su “defensa”, muy al estilo de Estados Unidos que permite que desde los 18 años –en algunos estados desde los 16 años- se puedan adquirir armas y a los 21 equipos de mayor potencia.

Tan solo las estadísticas del primer semestre del 2022 muestran la gravedad del problema que enfrenta Estados Unidos: Hasta el mes de mayo se tenía el registro de 213 tiroteos masivos y 10 asesinatos en masa, además de la muerte de 17 mil personas causada por arma de fuego, según la organización Gun Violence Archive. Y estas muertes están relacionadas en su gran mayoría con civiles, no con ataques de grupos de la delincuencia organizada.

El índice de impunidad y corrupción en México podría generar un mayor acceso de la delincuencia a una mayor diversidad de armas, las cuales, se sumarían a las del mercado negro que dista mucho de desaparecer.

Hoy, los requisitos que establece la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos son pertinentes para tener un “control” adecuado de estos instrumentos. Los países que registran los índices más bajos de criminalidad y homicidios cometidos con armas de fuego no son aquellos que permiten a sus ciudadanos tener armas para su defensa, sino aquellos que cuentan con cuerpos policiacos preparados y honestos.

Gabinete blindado

Al cumplirse el primer año del triunfo de Morena en Michoacán, al partido oficial se le hizo buena idea realizar un festejo –ellos lo llamaron jornada de información- para celebrar su arribo al poder. Más allá de la pertinencia del encuentro, este sirvió para reafirmar aspectos importantes: La inasistencia y declaraciones de quien se asumía como dirigente estatal, Ana Lilia Guillén, muestra una clara división al interior del partido que seguramente se agudizará durante el proceso interno para la elección de consejeros; la zalamería mostrada al secretario de Gobernación, Adán Augusto López, lo mostró como el ungido para el 2024 y, por último, la declaración de que no habrá cambios en el Gabinete, al menos en los próximos meses muestra el nivel de compromiso que existe con algunos grupos políticos y empresariales.

Otro periodista asesinado

En Tamaulipas se registró el asesinato de Antonio de la Cruz, periodista en Ciudad Victoria. Con este ataque, suman 12 homicidios tan solo en el primer semestre de 2022. Esta cifra, correspondiente al 2017, era la más alta registrada en las últimas décadas, pero en todo un año.