Ha transcurrido un año de mi trabajo en el Senado de la República, y como me comprometí en campaña a través de la Propuesta 39, he basado mi agenda legislativa en impulsar una ruta de trabajo político que haga cumplir las aspiraciones más nobles de justicia social, paz, democracia y soberanía.
Desde el Senado he defendido los derechos del pueblo, he intentado pronunciar y manifestar la voz de la gente, he luchado para que el Senado se convierta en una tribuna que permita expresar los sentimientos y aspiraciones más sentidas del pueblo, en una tribuna en la que se exponga las más nobles causas populares y sociales.
Durante este primer año de actividades legislativas en el Senado, -entre muchas otras cosas-, impulsamos la educación inclusiva, con lo cual pugnamos porque se evite la discriminación y exclusión social de los niños, niñas y jóvenes que viven con alguna discapacidad, asimismo, eliminamos las evaluaciones punitivas que se impusieron con la nefasta Reforma Educativa de Peña Nieto en 2013. En el tema de la educación superior, propuse una iniciativa para que el presupuesto estatal no fuera regresivo, con el objetivo de combatir la crisis financiera que aqueja a las universidades públicas.
También exhorté a la Junta de Coordinación Política del Senado de la República a crear la comisión especial para el seguimiento y atención de la caravana de migrantes centroamericanos en territorio nacional, ya que era urgente que se garantizara el respeto de sus derechos humanos, porque ¡Ninguna persona, ningún ser humano, es ilegal!
Se lo difícil de la situación que se vive en la entidad: la violencia desbordada, la falta de empleo, la crisis del sistema de salud y educativo, las grandes carencias del presupuesto público. Por eso he subido a la tribuna para defender y expresar la voz de las y los michoacanos en el Senado, en ese sentido presenté un exhorto al Gobierno de Michoacán y a diferentes autoridades locales para que se verifiquen las condiciones laborales de las y los trabajadores del Hotel Virrey de Mendoza de la ciudad de Morelia y para que terminen las amenazas y hostigamiento contra los trabajadores del sector salud de Michoacán, pertenecientes al sindicato General Lázaro Cárdenas del Río, porque estoy convencida de que no podemos tolerar más abusos de la patronal contra los trabajadores y trabajadoras.
Las inundaciones sufridas en la entidad el pasado 22 de octubre, provocadas por las lluvias ocasionadas por el huracán Willa, generaron afectaciones para las familias de diversas entidades del país, entre las que se encontraba Michoacán, ante ello, exhorte al Poder Ejecutivo federal a acelerar los procedimientos para que se aplicaran los recursos del Fondo de Desastres Naturales para la atención y recuperación de las afectaciones generadas.
Asimismo, presenté y suscribí diversas iniciativas, en total 44, también presenté y suscribí un total de 18 puntos de acuerdo. Sé que esto no es suficiente. Estoy consciente de que hay mucho por hacer, y lo digo con toda la humildad y honestidad posible.
Por eso, en el segundo año, y en los que siguen, profundizaremos la Cuarta Transformación, mantendremos nuestras convicciones fuertes, nuestra lucha contra los perjudiciales vestigios del neoliberalismo y no claudicaremos a nuestro principio de legislar para el pueblo y hacer leyes para la gente.
Hoy, a un año de mi labor como representante del pueblo en el Senado de la República, someto al juicio popular, a la opinión pública, al escrutinio social, mi labor como legisladora. No sólo por obligación, sino sobre todo porque es necesario que las bases de esta gran transformación se hagan partícipes, el pueblo pone y el pueblo quita.
La Cuarta Transformación avanzará inevitablemente, está marcado en las venas de nuestro pueblo y en su memoria histórica. ¡Nos depara un mejor destino! ¡Por el pueblo, por la historia!
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