Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- “¿Hay alguien que no haya visto Ghostbusters?”, preguntó el director Jason Reitman a la audiencia reunida en la sala 4 de Cinépolis Centro, sede de la clase maestra organizada por el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).
Pero más que eso, la definición más acertada sería conversación, con todo el espíritu que éstas pueden tener al darse entre amigos, porque así lo transmitieron Jason y su padre, Ivan Reitman.
En esa conversación se abordaron distintos temas relacionados con el cine, desde la realización hasta la relación filial-profesional entre Jason e Ivan, además de cuestiones filosóficas como la razón de ser de la cinematografía y la narración de historias.
Respecto a esta última cuestión, Jason Reitman consideró que los seres humanos “nacemos en medio del misterio, entonces el narrar es para intentar contestarnos esas preguntas sobre quiénes somos”.
Concretamente en el proceso de hacer cine, afirmó que las películas “son cosas que dices quieres hacer pero ni sabes realmente por qué, se trata de una necesidad interna”.
Aunque para hacer posible que la respuesta a esa necesidad sea óptima, añadió, es necesario atender diferentes cuestiones como la edición y la maleabilidad que este proceso puede dar a las películas. O como hacer casting, que es una de las más relevantes, según Jason Reitman, por el simple hecho de que “las decisiones más importantes que se pueden tomar es qué actores estarán en la cinta”.
Sin embargo, Jason aseguró que ha aprendido que las películas llegan a transformarse por sí solas “y cuando eso ocurre, debes escuchar”. En el caso de su contribución a la saga con “Ghostbusters: el legado”, destacó que se trata de una historia sobre lo que es la familia.
Mencionó que su padre y él esperan que ver “Ghostbusters: el legado” sea una experiencia cercana al descubrimiento, aunque el espectador ya conozca las películas de los 80.