Morelia, Michoacán-(OEM-Infomex).- Cualquier caminante que atraviese por el Bosque Cuauhtémoc apreciará el encanto que hay en ese lugar por la combinación de arquitectura, monumento y naturaleza. Pero dentro hay un corredor que muestra una cara distinta: se trata del Paseo Escultórico, cuyas obras han sido vandalizadas y robadas.
Fueron cinco piezas hechas por igual número de artistas colocadas en 2017, luego de que el estado se las comprara en 50 mil pesos cada una. La Secretaría de Cultura de Michoacán (Secum) invirtió esa cantidad y otros 50 mil pesos para la construcción de los basamentos, de acuerdo a la información proporcionada por Sandra Aguilera Anaya, titular de la dependencia.
Las obras colocadas fueron “La paz en Michoacán”, de Alfonso Mata; “Oda a las Artes”, de Ibeth Ceja; “Tornado”, de Roxana Cervantes; Tatuaje al Sol, de Rocío Sánchez, y “Vida Laberinto”, de Antonio Luna.
Aguilera agrega que en el momento de la colocación de este paseo no hubo un convenio con el ayuntamiento de Morelia ni con la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) para el cuidado de las piezas.
A manera de contexto, Aguilera Anaya contó que el Paseo escultórico sí tuvo los permisos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y fue inaugurado en 2017. Además, la temática que atravesaba las obras era, justamente, el arte.
Se apostó, dijo, “a que el trabajo de los artistas michoacanos fuera mostrado en distintos espacios de la ciudad y más en un lugar como el Bosque Cuauhtémoc; las esculturas en cualquier lugar público están expuestas a la cotidianidad y a la posibilidad de que sean vandalizadas y robadas, como ha sucedido con los bronces y placas”.
En relación a ello, la titular de la Secretaría de Cultura de Morelia (Secultura) Cardiela Amezcua Luna, recordó el caso de las esculturas que estaban colocadas sobre la Avenida Solidaridad, un conjunto escultórico de tres piezas sustraídas en 2019.
La funcionaria comentó que para la atención de este caso, llevaron a cabo el protocolo de las denuncias: “Se hizo acta, seguimos todos los pasos que se deben hacer a nivel jurídico desde la dirección de patrimonio del ayuntamiento”, pero que hoy, a tres años del suceso, no se han encontrado culpables ni las piezas.
Afirma que después del robo se hizo un recuento del patrimonio escultórico de Morelia, porque algunas obras son municipales, otras de la Universidad Michoacana, otras del estado y algunas incluso de propiedad privada. Así, el ayuntamiento tiene un catálogo de aproximadamente 700 piezas entre esculturas, piezas y placas.
Sin embargo, agrega que ese no fue el último caso, puesto que en la Plaza de la Paz fue robada en enero de este año la placa de bronce colocada en el Memorial a las víctimas de feminicidio, la cual fue inaugurada en noviembre de 2020. Amezcua Luna promete que sí repondrán la pieza, pero en PVC.
Sin avances
De vuelta al caso del Paseo Escultórico en el Bosque Cuauhtémoc, todavía no hay acuerdos con los artistas para la reposición de piezas, aunque estos sabían la posibilidad de que fueran dañadas, según comentó Aguilera Anaya.
En su momento, la persona que se hizo responsable de atender el tema de los robos fue Azucena Solórzano, antigua jefa del departamento de Artes Plásticas de la Secum, área encargada de coordinar la selección, compra y colocación de las piezas.
Actualmente, Azucena Solórzano continúa en las filas de la Secum, pero como jefa de Relaciones Públicas. Sin embargo, aseveró que al estar en Artes Plásticas llevó a cabo su parte del proceso para que fuera presentada una denuncia formal, trabajo que debía finalizar el secretario jurídico de la Secum, Francisco Flores.
No obstante, la denuncia todavía no ha sido presentada, pues según afirmó Aguilera Anaya, “nosotros hicimos un diagnóstico a través de la Dirección de Patrimonio, pero no ha habido avance en ver el tema con seguridad pública”.
