Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Con una denuncia penal interpuesta ante la Fiscalía General del Estado (FGE), el Colegio Autónomo de Taekwondo mantiene una acusación de abuso de confianza y manejos turbios de los recursos económicos por parte de la Unión Michoacana de Taekwondo.
En entrevista con El Sol de Morelia, Ociel Samsari González Correa, quien pertenece a dicho colegio y además es instructor de la escuela Fuerzas CAT, explicó que junto a otros cinco maestros decidieron presentar la denuncia el pasado mes de noviembre, ya que argumentó que se detectó opacidad en la administración de los fondos.
Y es que se debe recordar que la Unión Michoacana de Taekwondo funge como el enlace directo con la Federación Mexicana de la disciplina, por lo que todos los trámites de registro, afiliación y credencialización deben pasar por sus manos; sin embargo, los quejosos aseveraron que es un organismo que carece de transparencia al momento de rendir cuentas.
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“Nosotros a inicio de año para poder estar afiliados a la federación hacemos un pago universal que va entre 250 y 300 pesos, el maestro también paga un monto de 800 pesos para poder cubrir la constancia de la escuela. Estamos hablando que de una institución pequeña deben registrar al menos 7 escuelas y cada escuela debe integrarse por 28 alumnos, eso nos da 196 personas y una cifra final de aproximadamente 58 mil 800 pesos, misma que no se termina por transparentar”.
Aunque por varios años esta ha sido la dinámica, Ociel González declaró que la “gota que derramó el vaso” fue cuando en 2020 no recibieron las credenciales de sus alumnos, pese a que se pagaron en tiempo y forma, “pues el argumento que nos presentaron es que no se tenía dinero en las arcas porque se prestaron 100 mil pesos a Mario Ruiz, presidente del comité directivo que falleció ese mismo año a causa del cáncer”.
Si bien lo declarado en la carpeta de investigación de la FGE se mantiene confidencial por el proceso de investigación en que se encuentra, el Sol de Morelia pudo conocer que la denuncia recae directamente en contra de David Juárez Lagunas y Raúl Hernández Ponce, quienes ostentan el cargo de vicepresidente y tesorero, respectivamente, de la Unión Michoacana de Taekwondo.
Conflicto con tintes políticos
En contraparte, el integrante de la Unión Michoacana de Taekwondo, Hugo Hernández, explicó que la entrega de afiliaciones y credenciales se retrasó por la pandemia, pero compartió que en la primera reunión de conciliación que sostuvieron en las instalaciones de la FGE, se le llevaron físicamente los documentos a los demandantes, quienes optaron por rechazarlas.
“Ellos a finales de marzo del 2020 realizaron los pagos correspondientes, pero después se vino un confinamiento en el que la Federación Mexicana de Taekwondo dejó de trabajar 100 días, por lo que fue por ahí de julio cuando todo se comenzó a reactivar y si normalmente se hace la entrega de la documentación en septiembre, con la pandemia es lógico que se iba a retrasar más”.
A decir de la Unión Michoacana, el motivo por el cual Ociel González y su padre Benjamín rechazaron las credenciales, es porque ahora están exigiendo el reembolso íntegro de lo que se pagó en el mes de marzo, trámite que Hugo Hernández afirmó ya no es avalado por la propia federación.
“Se les explicó que todas las afiliaciones y torneos que se pagaron para el 2020 quedaron con validez para este año, pues toda la cuestión administrativa se encuentra operando de manera normal desde el mes de octubre, pero son ellos quienes no quisieron recibir nada”.
Por último, el profesor de taekwondo consideró que la batalla legal y de declaraciones obedece a que se viene un proceso de renovación de la mesa directiva de la Unión Michoacana de Taekwondo, pues con la muerte del expresidente Mario Ruiz, la federación deberá convocar en su momento a elecciones, “y eso quieras o no mueve en lo político, siempre habrá una piedra en el zapato”.
