MORELIA, Mich.- Es muy común encontrar vendedores ambulantes en el Centro Histórico de la capital michoacana, y es que aunque en teoría esta práctica no está permitida, existe tolerancia para cierto tipo de vendedores.
En entrevista con medios de comunicación, el secretario del Ayuntamiento, Humberto Arróniz Reyes, aseguró que existen horarios y zonas de tolerancia para la venta de productos en vía pública.
Siendo entre las 6:00 y las 8:30 las horas permitidas para la venta de comida en el primer cuadro del Centro Histórico, mientras que a partir de las 21:00 horas esta tolerancia se vuelve a aplicar para vendedores ambulantes, tal es el caso de aquellos que moran en los portales frente a la Catedral y la cerrada de San Agustín.
Sin embargo, esta tolerancia no aplica para todos los comerciantes, pues a decir de personal de la Dirección de Mercados, el ambulantaje sólo es permitido para aquellos que no afecten la estética visual de la ciudad.
Después de la reubicación en 2001 quedaron algunos giros tolerados como globos, algodón de azúcar, puestos de periódicos, boleros y personas que venden mapas, porque la actividad que realizan no causa molestia al aspecto arquitectónico que nos pide la UNESCO para que la ciudad de Morelia conserve su nombramiento como patrimonio cultural de la humanidad
, declaró la encargada del área jurídica de la Dirección de Mercados, Sonia Cuevas.
En este sentido, Cuevas mencionó que los desalojos y decomisos de mercancías a vendedores de artesanías corresponden a la falta del permiso de tolerancia, el cual se debe pedir en la Dirección de Mercados, y a la “mala vista” que éstos generan al primer cuadro capitalino.
Así pues, el reglamento para las centrales de abastos, mercados públicos municipales, plazas comerciales y comercio en vía pública no establece que los permisos de tolerancia se otorguen según el aporte estético de los comerciantes al Centro Histórico, sino a una serie de lineamientos y un pago a la Tesorería Municipal.
No obstante, con o sin permisos de tolerancia, el comercio ambulante es una actividad que parece estar lejos de desaparecer, sólo basta visitar la Avenida Madero los días sábado, posterior al encendido de luces de la Catedral, para observar la venta de todos tipo de insumos y comida en vía pública.