Cempasúchil chino no es una afrenta cultural

Historiadores coinciden en que por el uso que se le da a esta flor en los pueblos originarios no se vislumbra riesgo en su producción

Silvia Hernández

  · lunes 28 de octubre de 2019

Foto: Fernando Maldonado

Morelia, Michoacán.- El dominio que ha ganado China en la producción de flor de cempasúchil, no representa un riesgo cultural para los pueblos originarios de Michoacán, enfatizó Amaruc Lucas Hernández, director del Centro Nicolaita de Estudios de Pueblos Originarios de Michoacán.

Explicó que el significado para los pueblos originarios purépechas representa el calor, la luz solar y la guía para los espíritus que vienen la Noche de Muertos. Además de la flor de 20 pétalos, para los pueblos indígenas se le domina “tirinkini”, es la identidad de un pueblo, como los de la Ribera del Lago de Pátzcuaro.

Reiteró que para el pueblo mesoamericano (México y América Central) el cempasúchil es una flor nativa, asociada con el tema de ánimas, cultivada exclusivamente para velar a los fieles difuntos, además de darles otro uso, como es la medida alternativa.

“Esta flor se seguirá cultivando año con año, por los indígenas, no con fines de venta en grandes volúmenes, sino por cultura e identidad”, agregó el historiador adscrito a la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH).

Por su parte, especialista en historia de México y literatura, con más de 30 años de trayectoria en la UMSNH, Ramón Sánchez Reyna, descartó que antiguamente el país asiático se dedique la producción de esta flor emblemática de América, “no tengo la menor duda de que se la apropió”, externó.

Foto: Mariana Luna

Dijo tener conocimiento que otros países como Canadá han incursionado en la producción de cempasúchil, con fines ornamentales para sus espacios públicos y verdes, desde hace más de dos décadas. En tanto, recordó que México ha “domesticado” especies de otros países como son los tulipanes holandeses.

Con relación al uso industrial de China a la especie, comentó que en este país también se hace a través de empresas avícolas que destinan los pigmentos de la flor para la carne y yema de huevo.

“No creo que le interese a México introducir esos productos extranjeros tanto industriales como en un futuro en fresco cuando aquí tiene una vasta producción, cuyo fin primordial es la celebración de Noche de Muertos”, puntualizó el historiador.

Ambos investigadores y especialistas en la historia mexicana coincidieron que Michoacán trasciende por sus flores cempasúchil, nube y manita de león, una actividad que ha trascendido en los pueblos y comunidades indígenas.

Pese a ello, en una publicación del medio “The Economistic Times” se señala que los países orientales, principalmente La India, lleva más de 350 años cultivando la flor, la cual han establecido como parte de sus actividades religiosas.

Foto: Fernando Maldonado