En una década el Congreso del Estado de Michoacán ha aumentado en un 241% su presupuesto, aún cuando mantiene el mismo número de diputados y realiza las mismas funciones.
Además, su plantilla laboral de mil 300 empleados, lo coloca como el segundo estado con mayor número de personal.
Este 2019 le fue asignado un presupuesto global de 923 millones 814 mil pesos, que representó un 30% más que el año pasado.
De acuerdo con el informe legislativo 2018 elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad, el Congreso de Michoacán es el tercero más caro del país, en contraste con las cifras proporcionadas por el Consejo Nacional para la Evaluación, en 2016, que revela que 55.3% la población del estado vive en situación de pobreza.
Congresos con mayoría de Morena ignoran austeridad
Luego de las elecciones celebradas el año pasado, donde el partido Movimiento Regeneración Nacional, arrasó prácticamente en las elecciones intermedias donde se renovaron 113 alcaldías y el Poder Legislativo, se anunció un programa de austeridad en éste con un ahorro previsto de 100 millones de pesos.
Sin embargo, a la fecha la reducción presupuestal no fue posible y tampoco se logró que los diputados se redujeran su sueldo nominal que a la fecha es de 165 mil pesos mensuales.
Además en el concepto de “dietas”, algunos diputados locales alcanza hasta los 400 mil pesos mensuales.
La fracción parlamentaria de Morena (mayoritaria) presentó en septiembre del año pasado y ante la Junta de Coordinación Política un programa de austeridad que incluía la disminución a la dieta económica que reciben los diputados y que abarca salario y gastos en viáticos, labores de gestión, número de asesores, entre otros conceptos.
Sin embargo, la idea no prosperó y el diputado Alfredo Ramírez Bedolla, de Morena, dio a conocer que lo único que se logró es que los diputados michoacanos redujeran de seis a tres el número de asesores por diputado, más uno por fracción parlamentaria, con lo que se tiene un total de 160 asesores para este periodo legislativo.
La LXXIII legislatura de Michoacán dio de baja a 360 de los trabajadores de confianza que fueron con lo que según Ramírez Bedolla, se obtuvo un ahorro de casi 50 millones de pesos.
El Congreso local está conformado actualmente por 12 diputados de Morena; ocho diputados del PAN; cinco, del PRD; cuatro, de el PT; cinco, del PRI; dos, del PVEM y cuatro de representación parlamentaria integrada por uno de Movimiento Ciudadano, una ex diputada morenista y dos experredistas.
Este año un grupo de diputadas del PRI y del partido de Morena, así como asesores de este último partido viajaron en febrero pasado a China con cargo al erario, para asistir a escuelas de ese país, aún cuando sus comisiones legislativas no eran del tema de educación.
Las diputadas morenistas Mayela Salas Sáenz y Teresa López Hernández, solicitaron a la Secretaría de Administración y Finanzas del Poder Legislativo de Michoacán el reembolso de sus gastos de avión, hospedaje y comidas realizados durante su viaje, pero también incluyeron gastos por compra de juguetes, despensa y servicio de café.
El diputado Fermín Bernabé Bahena, presidente en ese entonces de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), dijo que sus compañeras de bancada (Morena) devolverían los recursos, en caso de haberlos recibido, pero sin embargo esto no se pudo comprobar.
El presupuesto anual 2019 del Congreso, de acuerdo con el diputado Alfredo Ramírez Bedolla se redujo en 60 millones de pesos, pero ello “provocará un descontrol financiero y administrativo”, advirtió.
“Si no se hace esto a tiempo vamos a tener un gran crecimiento y descontrol en el Congreso; tuvimos un avance y hay que cumplirlo, se redujo en 60 millones el presupuesto 2019, comparado con 2018, y para poder cumplir con el presupuesto tienen que limitarse viajes al extranjero, limitarse el tema de viáticos y reducción de personal; hay personal de más”, reconoció
En entrevistas por separado, Yarabí Ávila González, diputada priista y presidenta del Comité de Administración y Control, dijo que el dictamen para desechar el acuerdo de austeridad no contó con la opinión del comité, enfatizando entonces en realizar algunas modificaciones.
“No nos pidieron ninguna opinión al Comité pero sí es importante que dentro del Congreso se hagan modificaciones: revisión a los contratos de renta, si es que se puede reducir y la reclasificación de las cuentas, porque en el informe pareciera que la información es subjetiva y no se quiere dar información”.
Para el año entrante la propuesta de presupuesto 2020 que aún no entra al Pleno para su votación es de 983 millones de pesos, es decir, 60 millones más de lo que ejercen en el presupuesto de este 2019.
El dictamen del acuerdo de austeridad, presentado por el grupo parlamentario de Morena, propone la regulación de viáticos, turismo legislativo, evitar la adquisición de nuevo equipo y mobiliario para oficinas, y en caso de hacerlo, deberán sujetarse al presupuesto destinado a la inversión pública del Congreso.
También prohíbe la renta o compra de vehículos, seguro de gastos médicos mayores, fondo de ahorro, vales para comida y gasolina; y señala total austeridad y ahorro en la organización de eventos protocolarios y actos solemnes; además de que elimina los gastos discrecionales de la Junta de Coordinación Política, la Mesa Directiva, coordinaciones parlamentarias, comités y comisiones legislativas.
