/ sábado 15 de febrero de 2020

Drag Queen, más que sólo extravagancia

Jorge Alfredo Portillo cuenta con una gran trayectoria dentro de este ambiente, en el que ha invertido pasión, dedicación y mucho esfuerzo

MORELIA, Michoacán.-(OEM-Infomex).- Tiempo, pasión, dedicación y mucho esfuerzo es lo que Jorge Alfredo Portillo Jiménez ha invertido al transformismo, empezando desde bailarín y coreógrafo hasta convertirse en uno de los exponentes del drag queen en Michoacán, con una reconocida trayectoria a sus 21 años de vida.

“Tess Durkheim” es el personaje que representa en los escenarios y ofrece a su público, definiéndose como una draga alternativa pero sin un estilo en específico toda vez que puede transformarse en una de las varias exponentes de la música en habla hispana, pero también en “miss” de algún certamen de belleza.

Portillo Jiménez es originario de la Ciudad de México pero radica actualmente en Morelia, es bailarín y actualmente cursa la Licenciatura en Teatro en la Facultad Popular de Bellas Artes de la Universidad Michoacana. Conductor y animador residente en el Open Bar, pero también tiene sus propias presentaciones en centros nocturnos de Michoacán.

Foto: Jorge Portillo Cortesía

Busca empoderar al drag queen, pues considera que además de ser un espectáculo, socialmente envía un mensaje y discurso, sobre todo porque dentro y fuera de la comunidad LGBTTTI+, los travestis y los drags son aún más señalados, discriminados y descalificados, encontrándose excluidos aún más en el ámbito laboral.

“Siempre lo he dicho tiene que haber un discurso, y si no va a decir nada tiene que ser espectacular. Si te vas a quedar con el espectáculo, que es sorprender a los sentidos, la gente tiene que quedar pendeja, sorprendida, y es por lado por el que yo me he ido”, expresó en entrevista para El Sol de Morelia.

La historia de Jorge Alfredo no ha sido sencilla por el tiempo y esfuerzo dedicado a esta expresión artística, la cual también se ha convertido en su oficio y sustento económico en los últimos cinco años, iniciando como bailarín y coreógrafo en una academia de baile (la cual lo vio nacer) hasta dedicarse de lleno a los espectáculos drag.

Pese a las versiones en contra de la misma comunidad de dragas, define al drag como una sátira a la figura femenina, aunque también lo reconoce como un tributo, enlistando diversas vertientes como el comedy, eleganza, extravaganza y alternative, por citar algunas. La última de estas, la que más caracteriza a “Tess Durkheim”.

Nombre inspirado en el personaje que la cantante Cher realizó en el filme “Burlesque, junto a Christina Aguilera, en el año 2010. Mientras que su apellido refiere al sociólogo y filósofo francés, Émile Durkheim, afín a la corriente funcionalista. El cual salió de una clase de sociología.

De 45 a 60 minutos es el tiempo que le toma transformarse en uno de sus personajes, pues gracias a la práctica el maquillarse, colocarse una de sus pelucas y el “truco” lo han hecho más ágil para salir a los escenarios, aun cuando la primera llamada para darle la bienvenida esté siendo anunciada en los micrófonos de equis centro nocturno.

Frente a los mitos que envuelven a este tipo de transformismo, independientemente de que sea de hombre a mujer draga o de mujer a mujer draga, está el “dolly”, es decir el traje truco de esponjas que a todo travesti o drag los hace lucir con una figura más esbelta.

“Empiezo poniéndome el truco, porque se va acomodando y amoldando para que se alcance a ver natural, pero nunca se ve natural (…) el hecho de que se haya esparcido el movimiento drag nos hace ver expuestos, el truco de las medias era un tabú de muchos años, y ahora ya hasta existen tutoriales en Youtube”, dijo, entre risas.

A pesar de los estigmas sociales, Jorge contó desde inicio con el apoyo de su madre, y abuela, y posteriormente de su padre, quien paulatinamente fue aceptando su decisión, al grado de aconsejarle que lo hiciera, pero bien y de la mejor manera, lo cual ha sido una constante en su desarrollo profesional y laboral.

“No he vivido como una persona de 21 años, parece que tengo 32, me sacaron del closet a los 12 (…) mi mamá me hizo mi cuerpo, el truco, las esponjas para vernos más femeninas, con tela y relleno, después de haberme dicho que no quería me vistiera de mujer. Haz lo que quieras sólo cuídate, me dijo mi papá”, agregó.

Espectáculos drag o de transformismo, mal retribuidos

Aunque Portillo Jiménez reconoce avances en el consumismo de espectáculos de Drag Queen en Morelia y la contratación de centros nocturnos como “Mamá No lo Sabe”, “Limbo”, “Ni Santa Ni Diabla”, y otros más que ya están extintos, aún es mal pagado para quienes van empezando o no saben vender su espectáculo por la falta de espacios.

Su dieta no sobrepasa los dos mil pesos en uno, dos o tres shows en una sola noche, pese al desgaste físico y gastos adicionales debido al aún reducido público que concurre a los centros nocturnos de este giro; no así para los municipios que están ubicados al interior del estado, como Maravatío, Tacámbaro y Lázaro Cárdenas, por mencionar algunas.

Detalla que incluso los strippers llegan a ganar el doble o triple que los mismos transformistas en una sola noche, pese a que en ellas implica la producción y vestuario, mientras que en ellos, sí mantenerse físicamente en forma, pero no un gasto adicional como ellas, ya sea en maquillaje, pelucas o la misma ropa.

Por ello, han buscado maneras para visibilizar e impulsar los espectáculos de esta nueva forma de transformismo con “batalla de dragas” o concursos en centros nocturnos, y han funcionado, admite Jorge Alfredo, lo cual da una muestra “de que se puede vivir de esto, siempre y cuando se tome en serio y fijen las reglas adecuadas”.

Foto: Jorge Portillo Cortesía


“Hay noches buenas y noches malas (…) en todo México y Estados Unidos ha sido un movimiento, pero aquí a Morelia no lo dejamos entrar porque hemos estado cómodos en el transformismo, es la base del travestismo y de ahí le sigue el drag. Yo tengo la oportunidad de hacer las dos cosas”.

Finalmente y aunque de momento Jorge Alfredo no tiene definido el tiempo de de vida “Tess Durkheim” o del resto de personajes que ha interpretado o interpretará en un futuro cercano, tiene claro su objetivo de impulsar, dignificar y mostrar ese lado bueno del transformismo, sin clichés, discriminación ni exclusión.

Han buscado maneras para visibilizar e impulsar los espectáculos de esta nueva forma de transformismo con “batalla de dragas” o concursos en centros nocturnos

No he vivido como una persona de 21 años, parece que tengo 32, me sacaron del closet a los 12 (…) mi mamá me hizo mi cuerpo, el truco, las esponjas para vernos más femeninas

Jorge Alfredo Portillo Jiménez. Bailarín


MORELIA, Michoacán.-(OEM-Infomex).- Tiempo, pasión, dedicación y mucho esfuerzo es lo que Jorge Alfredo Portillo Jiménez ha invertido al transformismo, empezando desde bailarín y coreógrafo hasta convertirse en uno de los exponentes del drag queen en Michoacán, con una reconocida trayectoria a sus 21 años de vida.

“Tess Durkheim” es el personaje que representa en los escenarios y ofrece a su público, definiéndose como una draga alternativa pero sin un estilo en específico toda vez que puede transformarse en una de las varias exponentes de la música en habla hispana, pero también en “miss” de algún certamen de belleza.

Portillo Jiménez es originario de la Ciudad de México pero radica actualmente en Morelia, es bailarín y actualmente cursa la Licenciatura en Teatro en la Facultad Popular de Bellas Artes de la Universidad Michoacana. Conductor y animador residente en el Open Bar, pero también tiene sus propias presentaciones en centros nocturnos de Michoacán.

Foto: Jorge Portillo Cortesía

Busca empoderar al drag queen, pues considera que además de ser un espectáculo, socialmente envía un mensaje y discurso, sobre todo porque dentro y fuera de la comunidad LGBTTTI+, los travestis y los drags son aún más señalados, discriminados y descalificados, encontrándose excluidos aún más en el ámbito laboral.

“Siempre lo he dicho tiene que haber un discurso, y si no va a decir nada tiene que ser espectacular. Si te vas a quedar con el espectáculo, que es sorprender a los sentidos, la gente tiene que quedar pendeja, sorprendida, y es por lado por el que yo me he ido”, expresó en entrevista para El Sol de Morelia.

La historia de Jorge Alfredo no ha sido sencilla por el tiempo y esfuerzo dedicado a esta expresión artística, la cual también se ha convertido en su oficio y sustento económico en los últimos cinco años, iniciando como bailarín y coreógrafo en una academia de baile (la cual lo vio nacer) hasta dedicarse de lleno a los espectáculos drag.

Pese a las versiones en contra de la misma comunidad de dragas, define al drag como una sátira a la figura femenina, aunque también lo reconoce como un tributo, enlistando diversas vertientes como el comedy, eleganza, extravaganza y alternative, por citar algunas. La última de estas, la que más caracteriza a “Tess Durkheim”.

Nombre inspirado en el personaje que la cantante Cher realizó en el filme “Burlesque, junto a Christina Aguilera, en el año 2010. Mientras que su apellido refiere al sociólogo y filósofo francés, Émile Durkheim, afín a la corriente funcionalista. El cual salió de una clase de sociología.

De 45 a 60 minutos es el tiempo que le toma transformarse en uno de sus personajes, pues gracias a la práctica el maquillarse, colocarse una de sus pelucas y el “truco” lo han hecho más ágil para salir a los escenarios, aun cuando la primera llamada para darle la bienvenida esté siendo anunciada en los micrófonos de equis centro nocturno.

Frente a los mitos que envuelven a este tipo de transformismo, independientemente de que sea de hombre a mujer draga o de mujer a mujer draga, está el “dolly”, es decir el traje truco de esponjas que a todo travesti o drag los hace lucir con una figura más esbelta.

“Empiezo poniéndome el truco, porque se va acomodando y amoldando para que se alcance a ver natural, pero nunca se ve natural (…) el hecho de que se haya esparcido el movimiento drag nos hace ver expuestos, el truco de las medias era un tabú de muchos años, y ahora ya hasta existen tutoriales en Youtube”, dijo, entre risas.

A pesar de los estigmas sociales, Jorge contó desde inicio con el apoyo de su madre, y abuela, y posteriormente de su padre, quien paulatinamente fue aceptando su decisión, al grado de aconsejarle que lo hiciera, pero bien y de la mejor manera, lo cual ha sido una constante en su desarrollo profesional y laboral.

“No he vivido como una persona de 21 años, parece que tengo 32, me sacaron del closet a los 12 (…) mi mamá me hizo mi cuerpo, el truco, las esponjas para vernos más femeninas, con tela y relleno, después de haberme dicho que no quería me vistiera de mujer. Haz lo que quieras sólo cuídate, me dijo mi papá”, agregó.

Espectáculos drag o de transformismo, mal retribuidos

Aunque Portillo Jiménez reconoce avances en el consumismo de espectáculos de Drag Queen en Morelia y la contratación de centros nocturnos como “Mamá No lo Sabe”, “Limbo”, “Ni Santa Ni Diabla”, y otros más que ya están extintos, aún es mal pagado para quienes van empezando o no saben vender su espectáculo por la falta de espacios.

Su dieta no sobrepasa los dos mil pesos en uno, dos o tres shows en una sola noche, pese al desgaste físico y gastos adicionales debido al aún reducido público que concurre a los centros nocturnos de este giro; no así para los municipios que están ubicados al interior del estado, como Maravatío, Tacámbaro y Lázaro Cárdenas, por mencionar algunas.

Detalla que incluso los strippers llegan a ganar el doble o triple que los mismos transformistas en una sola noche, pese a que en ellas implica la producción y vestuario, mientras que en ellos, sí mantenerse físicamente en forma, pero no un gasto adicional como ellas, ya sea en maquillaje, pelucas o la misma ropa.

Por ello, han buscado maneras para visibilizar e impulsar los espectáculos de esta nueva forma de transformismo con “batalla de dragas” o concursos en centros nocturnos, y han funcionado, admite Jorge Alfredo, lo cual da una muestra “de que se puede vivir de esto, siempre y cuando se tome en serio y fijen las reglas adecuadas”.

Foto: Jorge Portillo Cortesía


“Hay noches buenas y noches malas (…) en todo México y Estados Unidos ha sido un movimiento, pero aquí a Morelia no lo dejamos entrar porque hemos estado cómodos en el transformismo, es la base del travestismo y de ahí le sigue el drag. Yo tengo la oportunidad de hacer las dos cosas”.

Finalmente y aunque de momento Jorge Alfredo no tiene definido el tiempo de de vida “Tess Durkheim” o del resto de personajes que ha interpretado o interpretará en un futuro cercano, tiene claro su objetivo de impulsar, dignificar y mostrar ese lado bueno del transformismo, sin clichés, discriminación ni exclusión.

Han buscado maneras para visibilizar e impulsar los espectáculos de esta nueva forma de transformismo con “batalla de dragas” o concursos en centros nocturnos

No he vivido como una persona de 21 años, parece que tengo 32, me sacaron del closet a los 12 (…) mi mamá me hizo mi cuerpo, el truco, las esponjas para vernos más femeninas

Jorge Alfredo Portillo Jiménez. Bailarín


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