Morelia, Michoacán. (OEM-Infomex).- Aunque la participación de la mujer en la economía nacional es cada vez mayor no sólo en los números en bruto, sino en la importancia de los puestos de trabajo, aún queda un largo tramo para alcanzar condiciones de igualdad con respecto a los varones.
Son muchas más las personas del género femenino que trabajan por menos de un salario mínimo y que además tienen una fuerte presencia en el mercado informal, esto es, que no cuentan con prestaciones sociales de ningún tipo.
Por si fuera poco, la mujer en la mayoría de las ocasiones realiza trabajos no remunerados pero que son fundamentales para el funcionamiento de la economía familiar: aseo de la casa, surtir la despensa y atención a los asuntos escolares de los hijos son sólo algunos ejemplos.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) calculó que esas tareas tienen un valor económico que supera los cuatro mil 600 millones de pesos a nivel nacional, equivalentes al 23.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
En Michoacán, de acuerdo a cifras del mismo instituto, recogidas por la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, elaborada por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, en 2018 la población total era de cuatro millones 676 mil 514 personas, de las cuales dos millones 251 mil 599 son hombres y dos millones 424 mil 915 son mujeres, prácticamente porcentajes iguales.
En lo que se refiere al mercado laboral, se informa que en 2018 un 39.5 por ciento de mujeres trabajaba como subordinadas con remuneración en trabajos informales, mientras que el 23 por ciento lo hacía también como subordinadas, pero en el mercado formal.
Esto nos dice que la proporción de mujeres que trabaja sin prestaciones es muy alta. Además, un 23.1 por ciento se declaró trabajando de forma independiente generando ingresos, y un 8.2 por ciento trabajaba pero sin remuneración.
En su documento Conociendo Michoacán, elaborado en 2017, el Inegi informa que el Producto Interno Bruto del estado es de 2.3 por ciento respecto al total nacional (con datos de 2015).
Las actividades económicas con más presencia de mujeres son Servicios de salud y asistencia social (73.5 por ciento) y Servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas (68.4 por ciento). En la administración pública estatal trabajan 48 mil 472 personas, de las cuales 49 por ciento son mujeres, lo que nos indica que la equidad de género en los puestos burocráticos sí está tomando rumbos positivos.
En rubros de mayor riesgo, como el de seguridad pública, trabajan cuatro mil 607 personas, y de ellas sólo 28 por ciento son mujeres, situación similar a la que se presenta en los centros penitenciarios de la entidad, en los cuales trabajan cinco mil 959 personas; 34 por ciento del género femenino.
Esta misma investigación señala que el porcentaje de mujeres mayor de 15 años perteneciente a la Población Económicamente Activa (PEA) es de 33.1 por ciento; en contraste, para el sector masculino la cifra es de 48.3 por ciento. Tomando en cuenta el equilibrio por género en la población total, esta última cifra nos habla de cómo se dan las desigualdades cuando hablamos de la situación laboral.
En el mismo tenor, de acuerdo al documento “México en Cifras” del Inegi, en el estado de Michoacán en el cuarto trimestre de 2019 la población femenina mayor de 15 años ocupada con ingresos de hasta un salario mínimo fue de 217 mil 561. En varones, la cantidad es de 147 mil nueve personas. En otras palabras, hay mucho más mujeres trabajando por menos de un salario mínimo que hombres.
En el otro extremo, es decir, la población ocupada mayor de 15 años con ingresos de más de cinco salarios mínimos, en la entidad se tenían registrados a 53 mil 454 hombres y 19 mil 967 mujeres. Es decir, hay mucho más hombres ganando cantidades superiores a cinco salarios mínimos en comparación con las mujeres. También existe un sector de la población mayor de 15 años que está ocupada pero no recibe ingresos. En esa situación se encuentran 102 mil 123 hombres y 67 mil 468 mujeres.
