Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El Centro Cultural de la UNAM campus Morelia ofrecerá este jueves, en punto de las 12:00 horas, una mesa de diálogo titulada Niñeces en movilidades, como parte del ciclo En Movimiento, una ventana a las migraciones.
Las invitadas a la charla son la doctora Patricia Román Reyes, profesora e investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de México, y su colega Miriam Reyes Tovar, integrante de la Universidad de Guanajuato, campus Celaya-Salvatierra.
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En ese contexto, ambas académicas van a abundar en estudios como el que realizó Fernando Alanís sobre personas deportadas entre 1931 y 1934. En dicho caso, autoridades de Estados Unidos repatriaron familias completas que ya habían comenzado una vida en el norte del continente y procreado hijos de origen mexicano. Sería el inicio de una serie de movilidades no voluntarias entre las fronteras, con capítulos como el de 1937, cuando en Morelia se adoptaron a los niños españoles que huían de la Guerra Civil.
En entrevista para este medio, el investigador del Colegio de Michoacán, Oscar Ariel Mojica Madrigal, dio más detalles de este ciclo que pretende acercar al público al fenómeno de las migraciones masivas y cómo éstas afectan el desarrollo pleno de las personas.
Dijo que en el caso de Patricia Román, hay un trabajo intenso en la protección para la infancia en contextos de movilidad, pues México se ha convertido en un país de transición. Parte de su tarea es presionar en la labor legislativa para que se proteja a estos menores, pero también se ha metido a fondo en las circunstancias que rodean a los que regresan al país luego de vivir principalmente en Estados Unidos.
Por su parte, Reyes Tovar se ha especializado en los casos de jornaleros agrícolas que emigran constantemente, no solo de un país a otro, sino dentro del mismo territorio nacional, con experiencia de campo en Guanajuato y Michoacán.
Se trata de familias que llegan de otras entidades a pedir trabajo, lo que origina la creación de casas temporales, pero también que los menores se inserten en la dinámica laboral a muy temprana edad en condiciones desfavorables.
“De pronto pareciera que el tema de los niños migrantes se apagó, pero sigue estando vigente. Aún vemos a cientos de familias yendo de un lugar a otro para conseguir empleos temporales y mal pagados, pues la dinámica ha cambiado: ya no solo es el padre que se va solo a Estados Unidos y manda remesas, sino que ahora se movilizan todos los integrantes del núcleo”.
Explica que en la década de los 80 el modelo era muy fijo: emigraba el padre y si acaso los hermanos varones, pero hoy en día la realidad marca que en un retorno al país, arriban niñas y niños que nacieron del otro lado de la frontera pero por necesidad deben vivir en México.
La mesa de análisis se podrá ver de manera virtual a través de las redes sociales de la UNAM Centro Cultural y del Observatorio Regional de las Migraciones.
