Morelia, Michoacán.- Asociaciones civiles y familiares de personas con trastorno del espectro autista (TEA) realizaron una marcha para exigir al gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, un espacio para la atención de infancias y adolescencias con esta condición.
En el marco del Día Mundial de la Concientización del Autismo, la llamada caminata azul partió de la Fuente de Las Tarascas a las 18:30 horas donde las personas vistieron este color alusivo a la fecha gritando consignas como "Morelia es azul" y "porque te amo, te acompaño".
Entre las exigencias de una de las madres, quien se identificó como Alma Delia Santoyo Ramírez señaló la discriminación por la que pasan sus hijos; mismos que son estigmatizados por la sociedad. Entre las cosas que manifestó fue ser víctimas al momento de solicitar un empleo "donde saben que tenemos un hijo azul y no nos dan trabajo", pues no existe ninguna guardería o escuela que les atienda durante las jornadas laborales.
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A las puertas del Congreso de Michoacán, presidente del Frente Nacional de Organizaciones de la Sociedad Civil (FOSC), Jorge Vázquez Díaz, agregó que hay que el autismo "no es una enfermedad, sino una manera de interpretar las palabras, colores, formas y ruidos del mundo que nos rodea".
Asimismo, puntualizó que este día es un recordatorio para reconocer derechos humanos y promover el respeto a la dignidad de las personas con TEA porque "tienen derecho a una libre autonomía, educación y empleo. Tienen una voz, una historia y un deseo de ser aceptadas".
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El último punto del recorrido fue el Palacio de Gobierno donde realizaron un mítin en el que otra de las manifestantes, Jaqueline Santoyo Gutiérrez hizo un llamado a ayudar, escuchar, tener empatía y a no juzgar para vivir en un mundo más amable, solidario y comprensivo.
La manifestación concluyó guardando un minuto de silencio por el fallecimiento de Sergio Alejandro, de nueve años, que perdió la vida por una sobredosis de medicamentos, presuntamente suministrados por su madre, por lo que resaltaron el abandono que viven las familias por las instituciones gubernamentales.