Morelia, Michoacán.-(OEM-Infomex).- A dos de que rinda su cuarto informe de actividades, el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, aseguró que este será un ejercicio de autocrítica y no de fiesta ni tampoco de cifras alegres de su administración, toda vez que espera rendir cuentas a los michoacanos de manera cruda y realista.

Detalló qué tal como lo ordena la Constitución del Estado acudirá al Congreso de Michoacán a entregar el documento de manera física y electrónica, y además de emitir un mensaje desde la máxima tribuna legislativa, en un diálogo abierto, respetuoso y franco escuchará las posturas de los distintos grupos parlamentarios y se pondrá “a las órdenes” de los legisladores.

No obstante, advirtió que Michoacán debe estar por encima de cualquier interés o postura partidario, esperando unir coincidencias y evitar cualquier tipo de separación, “voy con toda la actitud, ánimo y apertura (...) hay que nutrirnos sin la lógica del exterminio para que el prospere el estado.

Asimismo, dijo que fuera de cifras alegres en una fiesta o evento acartonado, cuya práctica se encuentra muy desgastada, buscará establecer diálogo directo con los distintos sectores de la sociedad: padres de familia, defensores de derechos humanos, empresarios, académicos y demás rubros, a fin de responder sus dudas y hablar de manera realista sobre las condiciones en que se encuentra la entidad.

Esta sería la segunda vez que el mandatario repetirá el formato de diálogo con los distintos sectores, tal como ocurrió en 2018, año en que si bien únicamente envió el documento de su informe al Congreso y no escuchó de viva voz a los legisladores, sí sostuvo una charla con los distintos sectores de la entidad.