Morelia, Michoacán- (OEM-Infomex).- Tras el recorte presupuestal planteado por el gobierno federal en 2021 para Michoacán, los organismos autónomos como el Instituto Electoral de Michoacán (IEM) resentirá los estragos en el año electoral, reconoció la consejera del mismo, Araceli Gutiérrez Cortés.
En entrevista con El Sol de Morelia, Gutiérrez Cortés explicó que en este contexto de recortes presupuestales, también está el reto económico que representa contar con los elementos sanitarios para hacer frente a la crisis de la pandemia por el Covid-19, así como el gasto que conlleva organizar un proceso electoral: contratación extra de personal, materiales y documentos electorales, el Programa de Programa de Resultados Electorales Preliminares y hasta las prerrogativas de los partidos políticos.
Mencionó que aún no hay certeza en lo que proyectarán como órgano electoral para 2021, planeación que deberá entregarse antes del 30 de septiembre al Gobierno del estado.
“Estamos conscientes de que la situación del estado y del país están terribles. Es un tema de presupuesto y pandemia, lo que genera gastos adicionales, un aumento que no está en nuestras manos y que debe estar considerado. Todavía no tenemos proyecto final, estamos tratando de hacer un presupuesto muy austero sin tocar el gasto ordinario del Instituto, solamente temas de procesos, Estamos definiendo con las áreas, replanteando para disminuir lo que más podamos”, explicó.
Sobre la organización de las elecciones, hizo énfasis en que tan solo en el proceso electoral pasado se requirieron de casi 30 millones para documentación electoral, 25 millones para material electoral, y en que el problema es que en el país solo hay 5 empresas que dan este tipo de servicios.
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“Habrá elecciones en 32 estados, estamos sujetos a una práctica monopólica horrible donde nos cobran lo que quieren. Si en el proceso pasado nos cobraron 30 millones, sin ningún problemas y con la mano en la cintura nos pueden cobrar 35 ó 40 millones, por ejemplo: el Prep, en las pasadas elecciones, tuvo un costo 25 millones, la misma empresa nos está presupuestando 38 millones para este año”.
Ante esta situación, la consejera resaltó que “el proceso electoral no lo podemos poner en riesgo, si hubiera un escenario fuerte en el que nos tuvieran que recortar una cantidad importante, estaríamos viendo por dónde apretarnos, pero el procesolo tendremos que salvaguardar a toda costa”.
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