/ lunes 8 de agosto de 2022

Prevén juicio largo y lento en caso Jessica González

Habrá cerca de 90 testimonios, de los cuales apenas se han desahogado siete

Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El juicio oral para desahogar testimonios que aporten pruebas sobre le feminicidio de Jessica González Villaseñor podría extenderse al menos un año más, pues tan solo la Fiscalía General del Estado (FGE) anunció la comparecencia de 50 personas, entre peritos de esa dependencia hasta gente cercana a la víctima.

Pero a ese nutrido desfile de declaraciones podría añadirse una cantidad similar por parte de la defensa de Diego Urik, el inculpado del caso que permanece en prisión desde el 30 de septiembre de 2020. En una conversación informal, el juez a cargo de las audiencias, Ariel Montoya Romero, aseveró que será imposible garantizar una justicia pronta y expedita cuando habrá cerca de 90 testimonios, de los cuales apenas se han desahogado siete.

Cabe recordar que tan solo para dar inicio al juicio oral transcurrió cerca de año y medio respecto a la fecha del asesinato (21 de septiembre de 2020), periodo en que los abogados defensores lograron interponer diferentes amparos que retrasaron esta parte del proceso.

Hasta ahora, además de agentes investigadores de la FGE han comparecido dos testigos claves en el caso: una joven de nombre Anayetzi, mejor amiga de la víctima, quien afirmó que Diego Urik ya ejercía violencia de pareja. En tanto, José Jair se describió como cercano al implicado y dijo atestiguar el día en que arrojó el cadáver en un predio al sur de la capital michoacana.

También declararon ante el juez la madre y el hermano de Jessica, revelando detalles del día de su desaparición.

Debido a los extenuantes cuestionarios a los que se enfrentan los testigos, en cada audiencia el tiempo alcanza para un máximo de tres personas, lo que prevé que el juicio vaya para largo. Al respecto, la señora Verónica Villaseñor, mamá de Jessica, ha dicho que la familia ha sido revictimizada porque la justicia otorga demasiadas herramientas al inculpado. “Primero nos esperamos un año y medio para que comenzara el juicio, así que ahora esperamos que se muestren todas las pruebas”, sentenció al salir de una de las más recientes audiencias, donde también denunció que reciben amenazas por parte de los abogados defensores y el propio padre de Diego Urik, que además trató de intimidar a un testigo en plena comparecencia.

Luego de un periodo vacacional en el Poder Judicial, este martes se reanudarán las audiencias en el Centro Integral para Adolescentes.

Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El juicio oral para desahogar testimonios que aporten pruebas sobre le feminicidio de Jessica González Villaseñor podría extenderse al menos un año más, pues tan solo la Fiscalía General del Estado (FGE) anunció la comparecencia de 50 personas, entre peritos de esa dependencia hasta gente cercana a la víctima.

Pero a ese nutrido desfile de declaraciones podría añadirse una cantidad similar por parte de la defensa de Diego Urik, el inculpado del caso que permanece en prisión desde el 30 de septiembre de 2020. En una conversación informal, el juez a cargo de las audiencias, Ariel Montoya Romero, aseveró que será imposible garantizar una justicia pronta y expedita cuando habrá cerca de 90 testimonios, de los cuales apenas se han desahogado siete.

Cabe recordar que tan solo para dar inicio al juicio oral transcurrió cerca de año y medio respecto a la fecha del asesinato (21 de septiembre de 2020), periodo en que los abogados defensores lograron interponer diferentes amparos que retrasaron esta parte del proceso.

Hasta ahora, además de agentes investigadores de la FGE han comparecido dos testigos claves en el caso: una joven de nombre Anayetzi, mejor amiga de la víctima, quien afirmó que Diego Urik ya ejercía violencia de pareja. En tanto, José Jair se describió como cercano al implicado y dijo atestiguar el día en que arrojó el cadáver en un predio al sur de la capital michoacana.

También declararon ante el juez la madre y el hermano de Jessica, revelando detalles del día de su desaparición.

Debido a los extenuantes cuestionarios a los que se enfrentan los testigos, en cada audiencia el tiempo alcanza para un máximo de tres personas, lo que prevé que el juicio vaya para largo. Al respecto, la señora Verónica Villaseñor, mamá de Jessica, ha dicho que la familia ha sido revictimizada porque la justicia otorga demasiadas herramientas al inculpado. “Primero nos esperamos un año y medio para que comenzara el juicio, así que ahora esperamos que se muestren todas las pruebas”, sentenció al salir de una de las más recientes audiencias, donde también denunció que reciben amenazas por parte de los abogados defensores y el propio padre de Diego Urik, que además trató de intimidar a un testigo en plena comparecencia.

Luego de un periodo vacacional en el Poder Judicial, este martes se reanudarán las audiencias en el Centro Integral para Adolescentes.

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