Después de 1 hora de descanso y una vez que los contingentes de los otros 3 puntos de la ciudad avanzaban, los docentes de municipios de la región Oriente del estado retomaron la caminata hacia el Centro Histórico por la Avenida Madero.
Antes tomaron fruta, algunas bebidas refrescantes, descansaron bajo la sombra de un árbol de la Plaza Villalongín, así como al pie de Las Tarascas. Aprovecharon para hacer llamadas telefónicas y ponerse al corriente en sus redes sociales.
Se hicieron presentes los vendedores de cacahuetes, pistachos y arándanos, que en sus hombros cargaban sendas cubetas.
Entre los docentes se repartían pequeños volantes para la contratación de préstamos personales para trabajadores federales, con montos de entre 5 mil y hasta 300 mil pesos, con plazos de 12 a 60 meses, y es que los docentes michoacanos se enfrentan a problemas de liquidez.
Después de medio día los rayos del sol comenzaron a asomarse con mayor intensidad de entre un cielo medio nublado en la capital michoacana. Las gorras, sombreros y sombrillas se hicieron presentes.
