Zamora, Michoacán.-Eran las 9:00 horas pm de la hora central de Perú, cuando 30 corredores partieron de la línea de salida a la montaña de Machu Picchu, entre ellos, Belén Wence, originaria de Zamora, Michoacán.
La corredora que se posicionó como la campeona en los 100 kilómetros del Ultramaratón Internacional de Machu Picchu, Perú, quien representó a México y regresó a Guadalajara, Jalisco, lugar donde actualmente vive.
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La travesía en Machu Picchu
Al entrar a la zona montañosa comenzó la travesía en la que se presentaron dificultades, pero Belén nunca desistió porque a pesar de que sus piernas le temblaron nunca perdió el objetivo.
La incertidumbre se hizo presente en la atleta cuando el marcador fue deficiente para ella; no obstante, ella se alió con una competidora de Argentina y en el camino se encontraron a más corredores que con la ayuda del GPS siguieron el recorrido.
A pesar de haber estudiado previamente la ruta y prever las necesidades de hidratación que necesitaría su cuerpo, ya en la práctica fue muy diferente porque no cumplió el abastecimiento como lo tenía pensado, sino hasta el kilómetro 35 cuando ya habían transcurrido cinco horas.
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Más tarde se presentó un descenso sin sendero aparente a la vista, en el cual dedicó dos horas e implicó un gran desgaste físico y una inseguridad emocional.
Ruta a la Victoria
Pero cuando pensó que lo difícil de la ruta había pasado, se presentó lo más desafiante en el kilómetro 80, pues no había abasto de agua y además era momento de separarse de sus compañeros e ir por la meta.
El sol había declinado cuando la zamorana metió velocidad a sus pasos y cada participante tomó rumbo diferente. Belén Wence por un momento se encontró sola en el inmenso Machu Picchu, sólo veía a lo lejos las luces del pueblo en donde estaba la meta.
Con el objetivo en la mente, apretó el paso y no faltaron caídas y espinas que complicaron la llegada al triunfo después de un recorrido de tres horas.
