El subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio González, aseguró que el Paquete Contra la Inflación y Carestía (PACIC), es una ayuda complementaria a las acciones de política monetaria de los bancos centrales.
“Los bancos centrales, que son los que tienen el mandato único de controlar la inflación, están incrementando su tasa de interés. El PACIC es una acción complementaria a este esfuerzo que hacen los bancos centrales”, indicó el funcionario al término de un evento en la Secretaría de Economía (SE).
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Yorio González argumentó que el PACIC “tiene sentido” porque se ha buscado mitigar el alza de precios en 24 productos de la canasta básica, al igual que mantener estable el precio de la gasolina mediante incentivos fiscales.
En ese sentido, destacó que en la medida que disminuya el precio internacional del crudo, y por ende, baje el costo de la gasolina, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP) también consideraría disminuir los estímulos al precio de los combustibles en el país.
“Hay otras series de acciones dentro del PACIC que están tratando de abordar la naturaleza del choque de oferta que tiene que ver con infraestructura o facilitar la logística, para tratar de disminuir esos costos”, detalló.
Según datos de la dependencia, a casi tres meses de su lanzamiento, el PACIC le ha costado 574 mil 624 millones de pesos al Gobierno federal. De este monto, el 75 por ciento es para evitar gasolinazos en México.
Yorio González subrayó que la inflación es un fenómeno mundial y que no afecta únicamente al país.
“Esto no es una excusa, sino que hay que trabajar en entender la naturaleza del efecto inflacionario. Es un fenómeno inflacionario que está nutriéndose y que viene por el lado de la oferta, y esto lo que genera es escasez de algunos productos y por consiguiente que se eleve su precio”, aseveró.
Esta mañana, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dijo que en julio se registró una inflación general anual de 8.15 por ciento, el nivel más alto en lo que va del año.
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Algunos de los productos que más se encarecieron durante el séptimo mes del año fueron la papa, refrescos, cebolla, tomate verde, carne de res, así como servicios en restaurantes, loncherías o taquerías.