Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- La antes exclusiva Casa de Gobierno del Estado abrió sus puertas ahora convertida en Casa Michoacán, en una preapertura que incluyó artesanías, gastronomía tradicional y recorridos por el interior del recinto este sábado 11 y domingo 12, y los días 18 y 19 de diciembre.
El acceso para los visitantes fue coordinado por el Instituto del Artesano Michoacano (IAM) y las secretarías estatales de Turismo (Sectur) y Cultura (Secum).
La titular de Secum, Gabriela Molina Aguilar, dijo en entrevista que el objetivo “es abrir un espacio para la ciudadanía con vocación cultural”.
Indicó que más adelante Casa Michoacán deberá tener “una conceptualización integral para ofrecer servicios culturales y lo que hemos dialogado con el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla es que sea un espacio para las expresiones de todos los municipios”.
El interior
Al interior de la residencia se dispusieron recorridos para el público en general, que puede ingresar en grupos de 10 personas y permanecer casi media hora. En el espacio, los visitantes pueden observar los rincones donde habitaron 10 exgobernadores, entre ellos Silvano Aureoles Conejo.
En el lugar puede observarse la sala duela, destinada para reuniones con comitivas amplias; la sala de la virgen, para encuentros de trabajo más reducidos; recámaras vacías, una biblioteca en la que sobreviven unos pocos títulos, un comedor para 16 personas; además del cuarto destinado al gobernador, que incluye el área donde se presume fue colocada una cama, un armario y burós de lujo para accesorios como relojes y anillos.
También un cuarto de baño dividido en distintas áreas: vapor, regadera, jacuzzi con hidromasaje, un pasadizo de emergencia, así como puertas y ventanales blindados.
De igual manera, chimeneas, una cancha de tenis, gimnasio, sauna y alberca.
En las paredes de la casa hay obras plásticas, en su mayor parte pictóricas y también algunos grabados hechos por Cecilio Carlos, Alfredo Zalce, María Luisa Pineda y Manuel Pérez Coronado.
El exterior
El jardín de la Casa Michoacán aloja las áreas de gastronomía tradicional, un bazar navideño colocado por la Coordinación del Sistema Penitenciario del Estado en el que se venden alrededor de 400 artículos elaborados por internos de seis penales.
Además, hay una ludoteca, un área para tomar y adoptar un pino y una biblioteca con publicaciones editadas por la Secum, las cuales son obsequiadas a los visitantes.
La más popular es el área gastronómica, que ofrece muestras de comida tradicional de las distintas regiones del estado en siete módulos.
En ellos hay alimentos como atápacua, de la región Uruapan; atole de pinole, de la zona de Pátzcuaro; pozole batido y mole con pollo, de Morelia.
A Apatzingán se le representa con la morisqueta y las costillas al tequila; los toqueres y aporreado, de Huetamo; mientras que de Zitácuaro hay huazontles y carne de puerco con chilacayote.
El cambio
La transformación de la Casa de Gobierno a Casa Michoacán fue anunciada el pasado 8 de noviembre por el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, para responder a los principios de austeridad republicana que rigen al gobierno federal en turno.
Esta es una acción que comparte similitudes con la implementada por el presidente Andrés Manuel López Obrador el 7 de diciembre del 2018, cuando abrió la entonces residencia oficial de Los Pinos al público en general.
