Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Por vivir violencia política en razón de género y violencia económica por parte de Brenda Fraga Gutiérrez, quien le quitaba más del 80 por ciento del salario, la diputada Gabriela Cázares Blanco anunció que dejará el curul.
Cázares Blanco llegó a la diputación local al suplir a Fraga Gutiérrez cuando ésta última asumió la Secretaría del Migrante (Semigrante); sin embargo, este jueves se informó que la funcionaria renunció al cargo para regresar al Congreso.
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En rueda de prensa, la petista informó que dejó la legislación local a raíz de que el partido político que representa le dió la espalda cuando expuso la violencia económica ejercida por la ex titular de Semigrante, quien a pesar de ser funcionaria estatal, también le quitaba más de 280 mil pesos de los 400 mil que gana mensualmente un diputado.
A pesar de hablar de la situación con el líder estatal, Reginaldo Sandoval Flores, el también diputado federal hizo caso omiso a lo sucedido en su contra.
Además, refirió que Fraga Gutiérrez no sólo le quitaba el salario devengado, sino también los viáticos y los recursos de gestión para operar en el Distrito de Uruapan, por lo cual, dijo que no quería ser cómplice ni tampoco quedarse callada ante los "abusos" y la violencia económica ejercida por ella.
Gabriela Cázares agregó que la ex funcionaria tiene a sus dos hermanos en la nómina del Congreso, Carlos Fraga y José Fraga, quienes supuestamente son asesores de la bancada del PT, pero señaló que no realizan su trabajo a pesar de recibir un sueldo.
"Brenda estuvo ejerciendo recursos del Poder Legislativo de manera ilegal, a pesar de que los cheques estaban a mi nombre, ella mandaba a alguien a recogerlos", expresó.
También remarcó ser incómoda dentro del PT y en el Congreso cuando denunció la violencia política en razón de género que vivió de parte de su homólogo petista, Baltazar Gaona García, así como los abusos y la corrupción.
