/ martes 3 de noviembre de 2020

Prohibir la subcontratación es un acto de justicia para las y los trabajadores

El pasado 28 de octubre el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció su intención de impulsar una iniciativa que prohíba el outsourcing o subcontratación, en la búsqueda de que no se continúe burlando la ley.


Esta intención del presidente, coincide con la iniciativa que presenté en marzo pasado con el impulso de sindicatos democráticos de nuestro país, en la cual se reforman diversas disposiciones de la Ley Federal del Trabajo, para eliminar definitivamente el outsourcing, que es un sistema que cancela de facto los derechos laborales de millones de compatriotas, condenándolos a la precarización laboral y a las jubilaciones miserables.


El Outsourcing es una expresión, de la degradación de las condiciones de empleo. No hay nadie que pueda defender que se condene a millones de compatriotas a este lastre que mantiene sus vidas en la miseria.


Estoy convencida de que la solución no es la regularización del outsourcing abusivo o ilegal como lo sostienen las cámaras empresariales, no existe “outsourcing bueno”. Debemos centrar la discusión en qué país ofrecemos a las y los trabajadores, en mi caso, mi voluntad es construir las mejores condiciones para el desarrollo humano del pueblo de México.


La subcontratación ya no es una excepción en el mundo del trabajo, lamentablemente se ha convertido en la regla, sus índices de crecimiento superan al resto de los trabajos formales. De acuerdo con información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), del 2003 a inicio de este año la tasa promedio anual del aumento del empleo formal ha sido de 3.3 por ciento, mientras que de acuerdo con el INEGI la del outsourcing ha alcanzado el 7.4 por ciento, sumando más de 5 millones de personas.


Son incuantificables las afectaciones que causa a las y los trabajadores la subcontratación, aunado a esto debemos sumar la evasión fiscal, la cual supera los 21 mil millones de pesos. La subcontratación es un mal por donde se vea.


Millones de trabajadoras y trabajadores votaron el 1 de julio de 2018 contra las reformas neoliberales; la eliminación de la figura de la subcontratación de la Ley Federal de Trabajo será un enorme paso en la búsqueda de justicia social.


¡Con los trabajadores y las trabajadoras todo, sin ellas, nada!



Te recomendamos el podcast ⬇️

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Acast

Deezer

El pasado 28 de octubre el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció su intención de impulsar una iniciativa que prohíba el outsourcing o subcontratación, en la búsqueda de que no se continúe burlando la ley.


Esta intención del presidente, coincide con la iniciativa que presenté en marzo pasado con el impulso de sindicatos democráticos de nuestro país, en la cual se reforman diversas disposiciones de la Ley Federal del Trabajo, para eliminar definitivamente el outsourcing, que es un sistema que cancela de facto los derechos laborales de millones de compatriotas, condenándolos a la precarización laboral y a las jubilaciones miserables.


El Outsourcing es una expresión, de la degradación de las condiciones de empleo. No hay nadie que pueda defender que se condene a millones de compatriotas a este lastre que mantiene sus vidas en la miseria.


Estoy convencida de que la solución no es la regularización del outsourcing abusivo o ilegal como lo sostienen las cámaras empresariales, no existe “outsourcing bueno”. Debemos centrar la discusión en qué país ofrecemos a las y los trabajadores, en mi caso, mi voluntad es construir las mejores condiciones para el desarrollo humano del pueblo de México.


La subcontratación ya no es una excepción en el mundo del trabajo, lamentablemente se ha convertido en la regla, sus índices de crecimiento superan al resto de los trabajos formales. De acuerdo con información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), del 2003 a inicio de este año la tasa promedio anual del aumento del empleo formal ha sido de 3.3 por ciento, mientras que de acuerdo con el INEGI la del outsourcing ha alcanzado el 7.4 por ciento, sumando más de 5 millones de personas.


Son incuantificables las afectaciones que causa a las y los trabajadores la subcontratación, aunado a esto debemos sumar la evasión fiscal, la cual supera los 21 mil millones de pesos. La subcontratación es un mal por donde se vea.


Millones de trabajadoras y trabajadores votaron el 1 de julio de 2018 contra las reformas neoliberales; la eliminación de la figura de la subcontratación de la Ley Federal de Trabajo será un enorme paso en la búsqueda de justicia social.


¡Con los trabajadores y las trabajadoras todo, sin ellas, nada!



Te recomendamos el podcast ⬇️

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Acast

Deezer