/ lunes 22 de agosto de 2022

La farsa de la austeridad franciscana

Primero los pobres pero de mis hijos diría el jefe de Estado, y es que cada vez que se habla de los hijos de los mandatarios de países donde gobierna una izquierda que parece más derecha que los propios neoliberales, observamos dos cosas: juniors con vida en el extranjero y vida llena de lujos como riqueza inexplicable. Tal es el caso más reciente de los hijos del presidente López que rápidamente desde la llegada de su padre al poder han desarrollado empresas chocolaterías y cerveceras, el más joven de los tres, decidió ir a estudiar a Inglaterra.

Lo mismo pasó con los hijos y nietos de Fidel Castro, cuando por medio de varias publicaciones en las propias redes sociales dieron a conocer sus vidas muy opuestas a las que viven sus compatriotas de la isla caribeña Cuba, que tiene que sortear día con día limitaciones. Lo mismo pasa con Nicolás Maduro Guerra y María Gabriela Chávez, hijos de los gobernantes de Venezuela, el actual presidente Nicolás Maduro y el ya fallecido Hugo Chávez, respectivamente.

Los dos primogénitos venezolanos han tenido varios casos que han ofendido al pueblo de su país, Nicolasito ha tenido viajes costosos al extranjero, además fue captado en la boda de un empresario bailando bajo una lluvia de dólares, razón que le llevó el repudio de los ciudadanos, en tanto Gabriela hija de Chávez se le estima una fortuna de 4.197 millones de dólares, medios serios dieron en su momento a conocer sus compras de grandes marcas como Chanel, Luis Vuitton, Michael Kors entre otros, varias de esas compras en el “imperio yankee”, específicamente en la gran manzana de Nueva York.

Ya se lo han demostrado a López, no existe austeridad en su familia, aunque lo niegue y llore en las mañaneras, al pueblo les dice que con par de zapatos basta, pero sus hijos han demostrado una y otra vez que ser hijos del presidente de México pueden vestir con tenis que rondan entre los 45 mil pesos y 150 mil pesos, es decir de 9 a 30 becas de jóvenes construyendo el futuro, mientras su padre lleva 200 pesos en la cartera. Al fin la farsa de que los pobres siempre serán los buenos sigue vendiendo.

México militarizado

Nuestro gobierno siempre se ha caracterizado de usar al Ejército para reprimir el pueblo, los hechos ahí están haciendo historia, ahora es lamentable el juego de las fuerzas militares en acciones políticas y cumpliendo caprichos de un hombre colérico, al cual el poder lo ha convertido en lo que siempre fue, un pequeño hombre mediocre con delirios de grandeza, una combinación que lleva a un país fuerte a derrumbarse por la polarización constante, pues existen todavía gente de fe que piensa que las dádivas son mejores que un empleo digno y un salario justo.

Caímos en las grande trampa de mentira, se nos dijo una vez y otra vez que militarizar un país no lleva a nada bueno, pero insistimos en creer más al payaso del circo que a la razón, desde el inicio nos mintieron, jamás hubo una guardia civil, siempre fue militar, López no se ha cansado de decir que existe desde la oposición posibles movimientos a un Golpe de Estado, lo peor es que esto no viene de afuera del que gobierna, lo viene haciendo desde su llegada, México está militarizado pero no es para tener paz, sino para reprimir al pueblo como lo han hecho aquellos neoliberales.

Enchiladas gourmet

Ya son varias las publicaciones en redes sociales que hablan de altos costos en platillos tradicionales, la semana que acaba de concluir se dio a conocer del precio de más de mil pesos por unas “memelitas” en el restaurante de la cantante Lila Downs “Tierra del Sol”, casi en el mismo valor fueron sorprendidos unos turistas en el pueblo mágico de Pátzcuaro, donde por 4 ordenes de enchiladas los comensales pagaron 800 pesos, PROFECO tuvo que hacer su chamba pues la noticia se hizo viral, cuando llegaron las autoridades ya habían cambiado los precios, el juego de siempre, siguen sin regular los negocios informales.Mientras tanto, a seguir comiendo mejor gorditas rellenas que para esas todavía nos alcanzan.

Primero los pobres pero de mis hijos diría el jefe de Estado, y es que cada vez que se habla de los hijos de los mandatarios de países donde gobierna una izquierda que parece más derecha que los propios neoliberales, observamos dos cosas: juniors con vida en el extranjero y vida llena de lujos como riqueza inexplicable. Tal es el caso más reciente de los hijos del presidente López que rápidamente desde la llegada de su padre al poder han desarrollado empresas chocolaterías y cerveceras, el más joven de los tres, decidió ir a estudiar a Inglaterra.

Lo mismo pasó con los hijos y nietos de Fidel Castro, cuando por medio de varias publicaciones en las propias redes sociales dieron a conocer sus vidas muy opuestas a las que viven sus compatriotas de la isla caribeña Cuba, que tiene que sortear día con día limitaciones. Lo mismo pasa con Nicolás Maduro Guerra y María Gabriela Chávez, hijos de los gobernantes de Venezuela, el actual presidente Nicolás Maduro y el ya fallecido Hugo Chávez, respectivamente.

Los dos primogénitos venezolanos han tenido varios casos que han ofendido al pueblo de su país, Nicolasito ha tenido viajes costosos al extranjero, además fue captado en la boda de un empresario bailando bajo una lluvia de dólares, razón que le llevó el repudio de los ciudadanos, en tanto Gabriela hija de Chávez se le estima una fortuna de 4.197 millones de dólares, medios serios dieron en su momento a conocer sus compras de grandes marcas como Chanel, Luis Vuitton, Michael Kors entre otros, varias de esas compras en el “imperio yankee”, específicamente en la gran manzana de Nueva York.

Ya se lo han demostrado a López, no existe austeridad en su familia, aunque lo niegue y llore en las mañaneras, al pueblo les dice que con par de zapatos basta, pero sus hijos han demostrado una y otra vez que ser hijos del presidente de México pueden vestir con tenis que rondan entre los 45 mil pesos y 150 mil pesos, es decir de 9 a 30 becas de jóvenes construyendo el futuro, mientras su padre lleva 200 pesos en la cartera. Al fin la farsa de que los pobres siempre serán los buenos sigue vendiendo.

México militarizado

Nuestro gobierno siempre se ha caracterizado de usar al Ejército para reprimir el pueblo, los hechos ahí están haciendo historia, ahora es lamentable el juego de las fuerzas militares en acciones políticas y cumpliendo caprichos de un hombre colérico, al cual el poder lo ha convertido en lo que siempre fue, un pequeño hombre mediocre con delirios de grandeza, una combinación que lleva a un país fuerte a derrumbarse por la polarización constante, pues existen todavía gente de fe que piensa que las dádivas son mejores que un empleo digno y un salario justo.

Caímos en las grande trampa de mentira, se nos dijo una vez y otra vez que militarizar un país no lleva a nada bueno, pero insistimos en creer más al payaso del circo que a la razón, desde el inicio nos mintieron, jamás hubo una guardia civil, siempre fue militar, López no se ha cansado de decir que existe desde la oposición posibles movimientos a un Golpe de Estado, lo peor es que esto no viene de afuera del que gobierna, lo viene haciendo desde su llegada, México está militarizado pero no es para tener paz, sino para reprimir al pueblo como lo han hecho aquellos neoliberales.

Enchiladas gourmet

Ya son varias las publicaciones en redes sociales que hablan de altos costos en platillos tradicionales, la semana que acaba de concluir se dio a conocer del precio de más de mil pesos por unas “memelitas” en el restaurante de la cantante Lila Downs “Tierra del Sol”, casi en el mismo valor fueron sorprendidos unos turistas en el pueblo mágico de Pátzcuaro, donde por 4 ordenes de enchiladas los comensales pagaron 800 pesos, PROFECO tuvo que hacer su chamba pues la noticia se hizo viral, cuando llegaron las autoridades ya habían cambiado los precios, el juego de siempre, siguen sin regular los negocios informales.Mientras tanto, a seguir comiendo mejor gorditas rellenas que para esas todavía nos alcanzan.