Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Los hongos son el alimento del futuro, afirma Atahualpa Guzmán de Casa, agrobiólogo de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), mientras conduce de Acuitzio del Canje hacia Morelia, luego de un recorrido para la recolección de fungis en el rancho El Tocuz, considerada como un área voluntaria para la conservación.
Indicó que en Michoacán se tienen documentadas cerca de 700 especies de hongos macromicetos, es decir, que se pueden ver y recolectar, de las cuales 200 son comestibles y alrededor de 90, tóxicos.
EN MICHOACÁN
⚪ 200 especies comestibles
⚪ 90 tóxicas
Sin embargo, consideró que en México hace falta estudiar este campo para ampliar la gama de hongos que se pueden comer, ya que actualmente el país se ubica en la segunda posición a nivel mundial (por debajo de China) en cuanto a la cantidad de especies comestibles.
“En México se han hecho estudios con menor intensidad, pero si continúa esta tendencia de analizar los hongos, probablemente rebase al país asiático (…) aquí existen aproximadamente dos mil especies, pero solo 450 comestibles, mientras que en China se pueden comer mil”, dijo.
Especies comestibles y tóxicas
El hongo amarillo, tecomate o terecua como se le conoce es uno de los comestibles más importantes, dijo el investigador Gómez Reyes, aunque uno de gran importancia cultural es el Hypomyces lactifluorum, o trompa u oreja de puerco, además las patitas de pájaro de las cuales existen 14 o 15 especies, también las básicas, las guachitas ubicadas en la Meseta Purépecha, los champiñones, el llanerito o el huitlacoche.
En tanto que los tóxicos, refirió que es la amanita bisporigera cuyo color es blanco y que puede llegar a causar la muerte; “causó hace unos años varios decesos en Michoacán, sobre todo en el Oriente como Zitácuaro y Maravatío, se registraron micetismos, así se le denomina a la intoxicación por consumo de hongos”, explicó.
La mayoría de intoxicaciones suelen suceder por confusión, ya sea por detrimento o pérdida del conocimiento de las especies, en el caso de las personas de origen rural. Mientras que en los turistas no saben identificarlas. Los psilocibes son una especie tóxica que se usa de manera recreativa y que se consume con frecuencia en esta temporada.
PARA SABER
‣ Ciertas especies son antidiabéticas, previenen el Alzheimer, Parkinson, colesterol o triglicéridos
No hay control de cosecha
En su mayoría, la gente de las comunidades rurales conocen en su totalidad las especies comestibles y cuando recolectan lo hacen con seguridad. Por el contrario, los jóvenes que buscan el género psilocibe, no respetan el gramaje permitido, afirmó el investigador.
“En el caso de la academia sí se debe tener un permiso de colecta, mismo que emite la Secretaría de Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales. En los proyectos de investigación que realizamos se saca un permiso de colecta y eso nos ampara, mientras que las comunidades hacen uso milenario de sus recursos y aprovechan el consumo y comercialización”, acotó.
En el caso de venta o exportación, como lo es para el tricholoma mesoamericano u hongo blanco de ocote también se requieren permisos. De acuerdo al profesor, este tipo de hongo se exportó de varias entidades del país, entre ellas Michoacán.
Impacto en el ecosistema
Los hongos son fundamentales en el ecosistema ya que se pueden alimentar de la materia orgánica, es decir, degradan los árboles o animales que mueren: reciclaje de nutrientes. Otras especies realizan un intercambio de nutrientes como el nitrógeno, fósforo, potasio, calcio o magnesio, mientras que el grupo de los parásitos controlan enfermedades como las plagas.
Atahualpa Guzmán detalló que los hongos tienen propiedades medicinales pues ayudan a regular la flora intestinal la cual genera vitaminas y protege contra el cáncer de colón. Otras especies son antidiabéticos, previenen el Alzheimer, Parkinson, colesterol o triglicéridos.
Además consideró que también el cultivo de hongos es ecológico, ya que mientras el sector agrícola gasta miles de litros, los hongos pueden reducir la cantidad del uso del líquido considerablemente.
Aunque desconoce en qué municipios existen más variedad de hongos, refirió que en Senguio y Pátzcuaro se han ubicado una gran cantidad, aunque el mes pasado durante una exposición en Uruapan, San Juan Nuevo y Cherán se identificaron más de 400 especies diferentes.
Finalmente, el investigador Víctor Manuel aseguró que se está viviendo un cambio muy importante en el país acerca de la visión de los hongos debido a la cantidad de ferias: “Esto hace que la gente conozca un recurso desconocido y al conocerlo se puede conservar lo que nos queda de bosques, porque si no hay bosques no hay hongos”.