/ viernes 27 de agosto de 2021

Asilo para los afganos… ¿y los mexicanos cuando?

En estos días hemos sido testigos de las acciones tomadas por el gobierno de México, para brindar refugio a Afganos que debido a la ocupación de los Talibanes, se han visto en la triste necesidad de abandonar su país, esto, es una iniciativa que se aplaude y reconoce, sin embargo nos deja con la sensación – nuevamente – de que México es candil de la calle y obscuridad en su casa, aquí unos datos.

En un tuit del Canciller Marcelo Ebrard, expresa lo siguiente: “Les informo que con activa participación de Guillermo Puente Ordorica, Embajador de México en Irán, hemos iniciado el procesamiento de las primeras solicitudes de refugio de ciudadanos afganos, especialmente de mujeres y niñas que así lo han solicitado.”

Esta última frase es la que más llama la atención…

Si bien el problema de acuerdo con los estimados de la Agencia de Refugiados de las naciones unidas 400,000 personas han tenido que huir de sus hogares en lo que va de este año, sumados a los 2, 900,000 ciudadanos afganos que ya habían sido desplazados por las condiciones geopolíticas de este país en el 2020. De acuerdo con los datos de esta agencia, el 80% de las personas que han abandonado el país de mayo a la fecha, son mujeres y niñas.

Sin embargo, no podemos dejar de lado la situación que se vive en México en lo que respecta al desplazamiento interno forzado y la violencia reiterada contra las mujeres, que si bien no es equiparable a lo que se vive actualmente en Afganistán los datos y cifras de nuestro país tampoco son muy agradables. Las cifras más recientes indican que del 2006 a la fecha, un total de 346, 945 mexicanos se han visto obligados a abandonar sus lugares de origen, principalmente para huir de los efectos de la creciente ola de violencia generada en el mayor de los casos por grupos armados.

De hecho, en el 2019, de acuerdo con datos de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH) los eventos de desplazamiento forzado masivo involucran a 8 estados del país, con un acumulado de 8,644 personas. Este desplazamiento interno forzado, pone de manifiesto la grave afectación de personas, familias y comunidades que se ven en la necesidad de abandonar sus hogares y reconstruir su vida en otro lugar, además de la falta de atención a las causas que lo originan. Entre las que se encuentra la Violencia generada por grupos armados organizados como primer factor sobre todo en aquellos estados en los que la presencia de grupos armados es una constante; la Violencia política, conflictividad social y conflictos territoriales; así como las Violaciones a los Derechos Humanos.

¿Y qué decir de la Violencia contra las mujeres? En este sentido, México, presenta una situación más complicada que Afganistán. En 2020 se reportaron 3,723 homicidios en contra de mujeres, ya sea homicidios dolosos o feminicidios, lo que nos arroja un resultado de más de 10 mujeres asesinadas cada día y en aumento. Ya que, del 2015 al 2020, los feminicidios se han incrementado en 130% aproximadamente, y las cifras de lo que va del 2021 son peores que las presentadas el año pasado. Ni hablar de las violaciones sexuales o la violencia, en todas sus manifestaciones, que viven a diario las mujeres mexicanas.

En conclusión, la medida tomada por el Ejecutivo de asilar a los ciudadanos afganos es de aplaudirse para muchos, sin embargo, con estos antecedentes lo verdaderamente plausible seria que el Gobierno de México atendiera con la misma urgencia y humanismo los problemas de los mexicanos que se encuentran invisibilizados. Y esto no enaltece a nadie, aunque lo quieran vender así.


En estos días hemos sido testigos de las acciones tomadas por el gobierno de México, para brindar refugio a Afganos que debido a la ocupación de los Talibanes, se han visto en la triste necesidad de abandonar su país, esto, es una iniciativa que se aplaude y reconoce, sin embargo nos deja con la sensación – nuevamente – de que México es candil de la calle y obscuridad en su casa, aquí unos datos.

En un tuit del Canciller Marcelo Ebrard, expresa lo siguiente: “Les informo que con activa participación de Guillermo Puente Ordorica, Embajador de México en Irán, hemos iniciado el procesamiento de las primeras solicitudes de refugio de ciudadanos afganos, especialmente de mujeres y niñas que así lo han solicitado.”

Esta última frase es la que más llama la atención…

Si bien el problema de acuerdo con los estimados de la Agencia de Refugiados de las naciones unidas 400,000 personas han tenido que huir de sus hogares en lo que va de este año, sumados a los 2, 900,000 ciudadanos afganos que ya habían sido desplazados por las condiciones geopolíticas de este país en el 2020. De acuerdo con los datos de esta agencia, el 80% de las personas que han abandonado el país de mayo a la fecha, son mujeres y niñas.

Sin embargo, no podemos dejar de lado la situación que se vive en México en lo que respecta al desplazamiento interno forzado y la violencia reiterada contra las mujeres, que si bien no es equiparable a lo que se vive actualmente en Afganistán los datos y cifras de nuestro país tampoco son muy agradables. Las cifras más recientes indican que del 2006 a la fecha, un total de 346, 945 mexicanos se han visto obligados a abandonar sus lugares de origen, principalmente para huir de los efectos de la creciente ola de violencia generada en el mayor de los casos por grupos armados.

De hecho, en el 2019, de acuerdo con datos de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH) los eventos de desplazamiento forzado masivo involucran a 8 estados del país, con un acumulado de 8,644 personas. Este desplazamiento interno forzado, pone de manifiesto la grave afectación de personas, familias y comunidades que se ven en la necesidad de abandonar sus hogares y reconstruir su vida en otro lugar, además de la falta de atención a las causas que lo originan. Entre las que se encuentra la Violencia generada por grupos armados organizados como primer factor sobre todo en aquellos estados en los que la presencia de grupos armados es una constante; la Violencia política, conflictividad social y conflictos territoriales; así como las Violaciones a los Derechos Humanos.

¿Y qué decir de la Violencia contra las mujeres? En este sentido, México, presenta una situación más complicada que Afganistán. En 2020 se reportaron 3,723 homicidios en contra de mujeres, ya sea homicidios dolosos o feminicidios, lo que nos arroja un resultado de más de 10 mujeres asesinadas cada día y en aumento. Ya que, del 2015 al 2020, los feminicidios se han incrementado en 130% aproximadamente, y las cifras de lo que va del 2021 son peores que las presentadas el año pasado. Ni hablar de las violaciones sexuales o la violencia, en todas sus manifestaciones, que viven a diario las mujeres mexicanas.

En conclusión, la medida tomada por el Ejecutivo de asilar a los ciudadanos afganos es de aplaudirse para muchos, sin embargo, con estos antecedentes lo verdaderamente plausible seria que el Gobierno de México atendiera con la misma urgencia y humanismo los problemas de los mexicanos que se encuentran invisibilizados. Y esto no enaltece a nadie, aunque lo quieran vender así.